Es frecuente que amigos y clientes nos pregunten si compran una casa vieja bien ubicada, ¿es mejor remodelar la casa o tirarla y construir una casa nueva?.
Es una pregunta interesante, que no tiene una sola respuesta, cada caso es particular. Casas en San Jerónimo, San Jemo, San Pedro, Fraccionamientos en Carretera Nacional (ya con unos años), muchas veces estas casas cambiaron de uso, pasaron de moda o ya no están vigentes en la arquitectura contemporánea, pero siguen teniendo una ubicación que puede ser atractiva según el sector de la ciudad donde estés haciendo tu vida. Si los números dan para hacer un negocio atractivo, vale la pena ahondar un poco más en este asunto.
Empecemos por el principio: Desde nuestra visión de la arquitectura, la mayoría de las casas que tienen 30 o 40 años se dejan modificar, al punto de ser irreconocibles luego de ser intervenidas. Lo primero que hay que revisar es si la casa es sólida estructuralmente, si el terreno y sus afectaciones han mostrado estabilidad al pasar de los años, si las losas, muros y columnas siguen viéndose robustos y no muestran grietas, humedades o cualquier signo de deterioro estructural. Ante la duda siempre será mejor recurrir a una visita técnica de un ingeniero calculista, quien tiene la experiencia suficiente para confirmar la estabilidad del inmueble o el riesgo de hacer esa inversión. Por otra parte, la distribución arquitectónica y alturas de losas son características del inmueble donde el ojo profesional del arquitecto, puede determinar de manera cualitativa si vale o no la pena incursionar en ese proyecto. Resueltos los dos puntos anteriores, debemos hacer la cuenta comparativa entre construir desde cero o remodelar una casa.
Costos de construir desde cero: Valor de compra del inmueble, costo para demoler la casa existente incluyendo retiro de cimientos en muchos de los casos, costo para llevarse todo el escombro de demolición, costo de tapial para encerrar la obra, licencia para demoler, proyecto arquitectónico, proyecto ejecutivo, todas las ingenierías respectivas, permisos y trámites para obtener la licencia de construcción y posteriormente la construcción completa.
Costos de remodelar: Valor de compra del inmueble, proyecto arquitectónico, algunos estudios puntuales, principalmente de red eléctrica y refuerzos estructurales si se necesitan. Todo esto antes del costo directo de la construcción.
Además de comparar el costo de inversión en los dos escenarios, es importante considerar el factor tiempo. Para demoler y construir una casa nueva, hay tiempos que dependen de la aprobación del municipio correspondiente, además de los tiempos normales para desarrollar un proyecto. En Arkit3, partiendo del s犀利士upuesto de que vamos a diseñar una casa de 500m2 aproximadamente, el tiempo para diseñar una casa y entregar un proyecto arquitectónico, ejecutivo, ingenierías, catálogo de conceptos, presupuesto y programa de obra, puede ser de aproximadamente 4 meses. Estos 4 meses no consideran los tiempos propios de las autoridades en aprobación de licencias. En una remodelación, siempre y cuando no haya ampliación del área, el propietario del inmueble le informa al municipio que va a llevar a cabo una remodelación. Tema muy diferente a pedir un permiso supeditado a aprobación.
En otras palabras, si yo quiero empezar una remodelación la próxima semana, me acerco a la Secretaría de Desarrollo con una carta informando, con esa copia de entrega con un sello del municipio no debo tener ningún problema para empezar.
A la hora de empezar a construir una obra nueva, no puedo hacer ninguna actividad hasta tener la licencia de construcción, esto puede acarrear sanciones y que la obra sea sellada por las autoridades correspondientes.
Revisado lo anterior y tomada la decisión de remodelar, consideramos conveniente empezar con la casa de los sueños. El arquitecto revisará como empata los sueños con la realidad del inmueble en la medida de lo posible. Siempre le decimos a los clientes: con tiempo y dinero todo se puede, es cuestión de cada quien elegir hasta donde marca sus límites en estos dos aspectos. Nosotros nos ponemos en los zapatos del cliente, y por supuesto en su cartera, para convertirnos en un asesor profesional que le muestra los elementos necesarios para que pueda tomar una decisión informado.
Un buen arquitecto, encontrará oportunidades en la mayoría de las casas viejas. Por inservibles que parezcan, es más fácil tirar todo y que el diseñador inmortalice su ego con el dinero del cliente, pero lo ético y coherente es buscar el cómo, y casi siempre hay un cómo, cómo respetar la ciudad, respetar un proyecto, cuidar los intereses del cliente, y a la final, luego de todos los sacrificios que hay detrás de construir una casa, entregar un hogar que traiga felicidad, tranquilidad y prosperidad a los futuros habitantes. Ese día el arquitecto se va con la frente en alto, con la conciencia tranquila y con la recompensa de la labor cumplida, listo para la siguiente familia y el siguiente proyecto.
Para empezar a ver y entender cómo vamos a intervenir nuestra casa, primero hay que aclarar unos conceptos que sabemos hemos escuchado y usado muchas veces, donde el uso incorrecto de esas palabras pueden confundirnos, aunque todos sepamos exactamente que queremos hacer en nuestra casa. Dependiendo del tipo de intervención, uso y características que le quieres dar a tus espacios, podemos Remodelar, Renovar y/o Restaurar, es por eso que primero que nada, te queremos dar una definición un poco más clara de lo que significa para nosotros cada una. REMODELAR es cambiar el uso del espacio. Ahí lo que se hace es que lo que antes era una alcoba o recamara, pase a ser un estudio o family room por ejemplo. RENOVAR es hacer espacios nuevos sin cambiar el uso. Es muy frecuente cuando renovamos la alcoba o recamara de los niños o quizás un baño, al espacio solo le damos nuevos colores y materiales. RESTAURAR es devolverle a un espacio su uso original. Muchas veces algún cuarto lo hemos utilizado como bodega o viceversa, incluso es cuando la casa y sus acabados están muy deteriorados y necesitamos hacer que vuelvan a tener una mejor apariencia. Así que cualquiera de estos conceptos, remodelar, renovar o restaurar lo podremos usar, dependerá más de lo que queramos hacer y que tu familia o arquitecto entienda lo que quieres.
El hacer una intervención física en nuestra casa tienen que ser vista como una inversión económica, la cual bien planificada, será siempre un buen camino para darle un gran toque a nuestros espacios y vida. Esto lo decimos porque sabemos que son pocas las veces en la vida en la que logramos comprar casa nueva o犀利士 nos mudamos a un lugar que deseamos. Hacer arreglos, mejoras o ampliaciones a nuestra casa dependerá mucho de nuestro flujo, donde podemos priorizar los espacios y sus usos, así iremos encontrando el mejor camino para ir dando el estilo que queremos a nuestro hogar. Es un proceso y puede tardar meses o incluso años, todo dependerá de ti, el planear, los costos y prioridades, así como un profesional que tenga una visión más amplia de materiales, procesos y posibilidades arquitectónicas para los espacios, esa persona es un arquitecto residencial, quien debe ser tu aliado estratégico para diseñar, construir y dar forma a la que quieres en tu casa.
Ahora sí, ya conociendo los conceptos y aliados para dar vida y estilo a tu hogar te damos los 5 pasos para “remodelar” tu casa.
Piensa global y estratégicamente.
Debes ver tus espacios y sus características como un todo. En la arquitectura la función y el estilo deben ser un concepto claro y que aplica para toda tu casa. Al evaluar el todo y luego las características de sus partes (espacios) encontraras y podrás establecer un plan general el cual abarque todo lo que deseas, ya luego lo priorizaras. La forma más sencilla y rápida es hacer una lista con tus deseos, lo bueno y lo malo de cada espacio, evalúa los acabados de piso, acabados de muros, colores, los muebles, la distribución, también la iluminación natural y artificial entre muchas otras cosas, así sabrás si quieres remodelar, renovar o restaurar cada espacio, porque quizás logres ver que la cocina sí te gusta y que es el baño de visitas al que quieres darle un nuevo estilo o quizás logres ver que lo que necesitas es ampliar uno de los cuartos o recamaras antes de cambiar el piso de la sala. Esta tarea es la más importante, preguntarnos y encontrar las respuestas antes de empezar cualquier cambio, esto te ayudara a disminuir costos, tiempos innecesarios, así como optimizar los esfuerzos que hagas en este proceso tanto tú como tu familia.
2.Define el estilo de diseño para la casa.
Muchas veces tomamos las cosas a la ligera y no tenemos claro cuál es nuestro estilo personal y cuál es el estilo de diseño de nuestra casa. Así que el cómo remodelar una casa, tiene que estar profundamente relacionado con quienes somos nosotros, muchas veces sugerimos ver imágenes por internet de diseñadores de casas, decoración de espacios y decoración de interiores, ingresar a portales web especializadas en arquitectura, revistas, etc., donde encontraras información de estilos que te pueden ayudar a determinar cuál es el tuyo y el de tu casa o departamento, luego combínalo con lo que verdaderamente te gusta y ese será el verdadero toque personal. No olvidemos que se trata de nuestro hogar.
3. Apóyate en profesionales de la arquitectura y la decoración.
Tú no tienes por qué saber al 100% cómo hacer para remodelar, renovar o restaurar los espacios de tu casa. Buscar un arquitecto es algo muy común y recomendable, él te va a orientar y guiar paso a paso en todo lo que hay que hacer, tú tomaras las decisiones finales, pero sí será de gran ayuda para que tu casa o departamento sean lo que verdaderamente deseas. Un arquitecto te ayudara a establecer el orden y la mejor ruta para hacer un correcto cambio, te dirá cuánto cuesta invertir en lo que quieres para tu casa por cada espacio, lograra aprovechar los metros cuadrados de la casa, por ejemplo, quieres cambiar la cocina porque no te gusta, pero quizás no tienes que demoler o reconstruir todo, solo con cambiar parte de los muebles de cocina y mejorar algo de la iluminación interior es suficiente.
4. Establece la forma y la función de los espacios.
En este proceso de encontrar lo mejor para ti y tu familia, quizás logres ver que debes cambiar la distribución de tu vivienda. Muchas veces el invertir el orden de los espacios es una gran idea, por ejemplo invertir el orden de la Cocina con el de lavandería o ampliar la terraza, son la mejor solución para encontrar un buen equilibrio y mayor amplitud de la casa. Para esto, el arquitecto residencial te ayudara a ver las implicaciones del tumbar, demoler o mover muros, subir techos, cambiar los recubrimientos de pisos y muros, ver los cambios en las conexiones eléctricas, de agua, drenaje, etc. Esos cambios sabemos que toman más tiempo y dinero, pero recuerda que estamos en la etapa de planeación de tu casa, aquí todo es válido hasta no poner un ladrillo o block, diseñar y planear tienen que ser visto como un ahorro frente a la obra y ejecución de un proyecto arquitectónico.
5. Establece un presupuesto y un tiempo.
Cuando hayas definido que quieres hacer y tengas más claro las implicaciones de remodelar, renovar o restaurar una casa, puedes hacer paquetes de obra. Esto quiere decir que juntes espacios que quisieras intervenir y el orden en el que te gustaría hacerlo, por ejemplo, remodelación de baños o ampliación del asador, posterior a eso será el diseño y remodelación de la fachada. El arquitecto y constructor sabrán y entenderán que cada uno lleva su propio presupuesto o cotización, determinaran en conjunto los mejores acabados de piso y muros, el tipo de ventana que quieren, el material de las puertas, los colores de las pinturas, la mejor iluminación, etc., para cada espacios. Aquí debes saber muy bien cuál es el monto y flujo que podrás pagar. Será más fácil para ti ver los costos de construcción y obra, así como los de fabricación de muebles por separado, donde luego podrás priorizar por dónde empezar a “remodelar” tú casa y el tiempo que se tarda en estar los cambios.
Conclusión. Antes de comenzar a “remodelar” una casa, lo más recomendables es planear cuidadosamente cada paso y detalle de lo que quieres hacer y como lo quieres hacer. Crea tu lista de deseos, de lo bueno y lo malo de cada espacio, sigue el plan que te has propuesto con tu arquitecto y tu familia, no hagas nada apresuradamente ya que esto te puede ahorrar tiempo y dinero. Por ultimo visualiza tu casa como un todo, que tiene un estilo determinado, y que cada espacio es reflejo de ese estilo con detalles muy personales.
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